Un buen detalle para regalar estas Navidades, y a un precio bastante económico son los colgantes y pulseras que diseña mi amiga Beatriz Mira Hafner. Su origen se encuentra en EE.UU. Cuando las familias se reúnen alrededor de la mesa y comen pollo, quien se encuentra el hueso de los deseos es la persona afortunada. El ritual consiste en lo siguiente: la persona que halla esta pieza junto a la que se encuentra a su lado, tira cada uno de un extremo del hueso, pide un deseo y, quien se queda con el trozo más grande, consigue que su deseo se haga realidad.
Podéis encontrarlos en el enlace a su página web. Existen en plata y bañados en oro, y dentro de éstos mi preferido es el wishbone bañado en oro y con cordón rojo; también existen para los hombres.
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